Fuentes alternativas de financiación: crowdfunding, confirming, factoring y leasing
La búsqueda de financiación es una necesidad para cualquier empresa y a medida que pasa el tiempo surgen nuevas formas de financiación que son igualmente válidas y que aportan muchas ventajas.
Las fuentes alternativas de financiación como el confirming, el factoring o el leasing son una forma de conseguir recursos en un tiempo reducido y no depender exclusivamente de las fórmulas tradicionales como los préstamos.
En este artículo que te explicamos en qué consisten estas formas de financiación alternativa que están ganando terreno entre las pymes en los últimos años. Hay que tener en cuenta que estás opciones han existido durante mucho tiempo, pero en los momentos de crisis se recurre a ellas con más frecuencia.
Confirming
El confirming se ha convertido en una fórmula alternativa de financiación que ha crecido de forma importante en los últimos años. De hecho, ya en el año 2019 se ha vivido un incremento de más de un 10 % en toda España, como fórmula de financiación para empresas.
Pero ¿qué es el confirming? El confirming consiste en que las entidades financieras se encargan de adelantar el pago a acreedores y proveedores de una empresa. De esta forma, se pueden afrontar las facturas de la empresa o una parte.
Se trata de una financiación para los acreedores de la empresa, ya que pueden cobrar su factura con anterioridad a la fecha establecida para el vencimiento. Por esta transacción se cobra una tarifa que puede asumirla el cliente o bien el proveedor.
El funcionamiento del confirming es muy sencillo, porque una vez que la entidad financiera ha analizado la situación y ha decidido aceptar la operación es cuando contacta con el proveedor para y le da la opción de cobrar el importe de la factura en el momento del vencimiento o bien cobrarla de forma anticipada.
En el caso de que decida cobrarla de forma anticipada, posiblemente tenga que pagar algunos gastos financieros. Puede ocurrir que el pago de la factura se realice una vez que ha pasado el vencimiento y, en este caso, es cuando se produce la financiación.
Factoring
El factoring es otra de las vías de financiación que se ha convertido en una de las más demandadas en los últimos tiempos. El factoring es una fórmula financiera con la cual la empresa puede ceder las facturas de ventas o de sus clientes a una tercera entidad, que puede ser en la mayoría de los casos una entidad bancaria.
De esta forma, será la entidad bancaria la que se encargue de cobrar la factura a los clientes. De hecho, es una forma de que la empresa reciba el importe de las facturas que ha cedido descontando un porcentaje.
Se puede afirmar que existen dos tipos de factoring dependiendo del riesgo que se quiera asumir. Por un lado, existe el factoring con recurso. En este caso el banco no asumirá el riesgo de impago, de esta forma, si el cliente no paga el banco puede dirigirse contra la empresa que ha cedido la factura.
Para conseguir recuperar el importe, el banco podrá emprender acciones judiciales, y en caso de conseguir que el cliente pague, devolverá las facturas a la empresa que se las cedió y exigirá la recuperación del importe que ha anticipado.
El otro tipo de factoring es el factoring sin recurso. Se trata de un tipo de operación en la cual no se asume por parte del banco el riesgo de insolvencia. En este caso, no es posible que se exija nuevamente a la empresa el importe que se ha adelantado.
Existen algunas diferencias importantes entre el factoring y el confirming. Esto es debido a que en el caso del confirming las facturas que se gestionan son las correspondientes a proveedores de la empresa, mientras que en el caso del factoring las facturas son las correspondientes a los clientes.
Otra diferencia importante es que en el caso del factoring se consigue liquidez de forma inmediata. De esta forma, la entidad sabe que siempre podrá cobrar las facturas emitidas cuando llegue el momento del pago.
En el caso del confirming hay que tener en cuenta que se trata de un servicio de pagos que son asegurados por el proveedor.
Hay que tener en cuenta que en el caso del confirming no se generan deudas, de esta forma la empresa puede usar esta técnica para conseguir la liquidez que necesita en el momento en que entrega las facturas al banco.
Gracias al factoring las empresas están destinando recursos solo a lo que necesitan y no tienen que estar prestando atención al cobro de las facturas de clientes.
Leasing
Otra de las formas de conseguir financiarse muy de moda entre las empresas es el leasing. El leasing consiste en que una empresa ofrece un determinado bien para su uso a una empresa durante un tiempo determinado.
Esta cesión implica pagar una cuota periódica a la empresa cedente de forma que quede cubierto el coste de amortización del bien, así como el coste del mantenimiento del bien. Una gran ventaja del leasing es que puede ser fiscalmente deducible según establece la normativa fiscal.
De hecho, mediante esta fórmula la empresa de leasing adquiere el bien para la empresa, recibiendo a cambio la cuota en concepto de mantenimiento, financiación e intereses generados.
En un contrato de leasing se establece una duración que puede ser la vida útil del bien en cuestión.
Crowdfunding
El crowdfunding es otra forma de financiación que se ha convertido en una alternativa importante en los últimos años. Se trata de la búsqueda de financiación a través de las aportaciones que un número elevado de pequeños inversores que aportarán para el desarrollo de tu idea o negocio.
El crowdfunding ha supuesto una revolución en la forma de obtener financiación que ha hecho posible la puesta en marcha de muchos proyectos y empresas en la actualidad.
Dentro del crowdfunding se pueden encontrar una gran variedad de opciones de financiación como puede ser el crowdlending o el Fintech que se han convertido en fórmulas de financiación cada vez más usadas.