Para ELCA es sencillo mejorar la productividad de los empleados
Desde el punto de vista de ELCA Granada mejorar la productividad de los empleados, ayudándoles a concentrarse más y a estar más cómodos en su puesto y en la empresa es tan positivo para ellos como para la empresa. La compañía tecnológica lleva muchos años trabajando en procesos que ayuden a mejorar la productividad de sus empleados y está logrando dar grandes pasos hacia delante en esa área.
La empresa tecnológica ELCA, con sede en Granada, conoce bien a sus empleados y sabe cómo conseguir que sean más productivos.
Todos conocemos a esa persona que antes de la hora de desayunar ya ha hecho muchísimas tareas del día, cuando a nosotros en cambio nos cuesta articular palabra antes de tomarnos el primer café de la mañana.
Pero en realidad ser productivo es solo cuestión de proponérselo, y como nos dicen desde ELCA, conseguir serlo en el trabajo está muy relacionado con la motivación de cada empleado a lograrlo.
Mesa de trabajo con empleados colaborando entre sí
ELCA nos ayuda a ser más productivos
La empresa tecnológica ELCA con el paso de los años ha sistematizado y creado muchos procesos para realizar las tareas más rápidamente y muchos de ellos se los enseña a sus empleados para maximizar su tiempo.
Una máxima que es importante recordar para ELCA es que la calidad siempre debe imperar sobre la cantidad. Así, aunque se piense erróneamente que el empleado que produce más es mejor, lo cierto es que debería valorarse más hacer menos pero que lo que se produce sea de calidad. El empleado debe concentrarse en hacer lo que hace lo mejor que sabe, dejando su sello personal y sintiéndose orgulloso de su trabajo.
Igual de importante es ser realista con los plazos, es decir, no ponerse plazos imposibles de cumplir. A la hora de realizar un calendario o planear varios meses lo ideal es que las metas que nos pongamos sean asumibles, dejando un margen de tiempo extra para hacer las cosas con más calidad.
Durante las horas de trabajo es importante concentrarse pero demasiado sencillo distraerse. Para lograrlo, pon tu móvil en silencio y evita lo máximo posible las distracciones, programando una hora al día para revisar los mensajes y correos personales, redes sociales, etc. evitando así que interfiera con tu trabajo.
Para conseguir no distraerse ni desanimarse una buena idea es priorizar nuestras tareas. Son muchos los empleados que deciden empezar su día realizando las tareas más sencillas para posteriormente encargarse de las que suponen un mayor esfuerzo.
Aunque puede parecer una buena idea en un primer momento, lo cierto es que así también conseguimos relegar las tareas más complicadas o pesadas al final del día, cuando nuestras fuerzas ya empiezan a flaquear. Por eso, desde ELCA nos recomiendan precisamente lo contrario, comenzar por las complicadas al empezar el día para terminar con las más sencillas, consiguiendo así un día mucho más calmado.
Aún así, tampoco podemos olvidarnos de lo necesario que es gestionar nuestra energía, ser más productivo en el trabajo implica saber cómo gestionar tus fuerzas, tanto físicas como mentales. Organízate en base a tu energía y no olvides tomarte un descanso de cinco minutos cada hora para reponerlas.
Una de las claves para incrementar nuestra productividad está en saber gestionar los recursos de los que disponemos. Para saber con qué recursos contamos es esencial planificar, establecer una serie de objetivos a corto, medio y largo plazo y hacer uso de un calendario con el que gestionar los tiempos para cada una de nuestras tareas correctamente.
La importancia de trabajar en armonía
Trabajarás igualmente más a gusto y en armonía personalizando tu lugar de trabajo. El trabajo es el lugar en el que pasamos la mayor parte del día, por lo que tiene sentido que nos sintamos a gusto en nuestro puesto. Para crear ese ambiente necesario para mejorar tu productividad puedes comprarte una planta, colocar fotos de amigos o familiares, adornos, decoración…
Pero el trabajo no lo es todo, y tan necesario como saber concentrarse correctamente es saber cuando parar, es recomendable hacer una serie de descansos para mejorar nuestra productividad. No te saltes la hora de la comida para llegar a una entrega, solo conseguirás hacerlo rápido y mal, come a la hora a la que tengas que comes y hazlo siempre bien lejos de tu escritorio para que te resulte más fácil despejarte.
