Se Busca al CEO de Foodies por Fraude de 1 Millón en Equity Crowdfunding
El crowdfunding como alternativa para la financiación de proyectos se ha convertido en un fenómeno mundial y ya es habitual encontrar plataformas de crowdfunding en cualquier país de mundo.
Una de estas plataformas es Fondeadora, una plataforma de crowdfunding ubicada en México que ha venido funcionando y ayudando a la financiación de proyectos desde hace 5 años. Sin embargo, en el crowdfunding como en tantos otros ámbitos hay un factor de riesgo que además suele ser alto al tratarse de proyectos que aún no son una realidad y que aspiran a convertirse en empresas y actividades reales gracias a los fondos recibidos a través del crowdfunding.
Es el caso del proyecto Foodies, ahora ya conocido como caso Foodies, un proyecto que consiste en ofrecer servicios a demanda para restaurantes que puso en marcha su campaña de crowdfunding de inversión en la plataforma Fondeadora obteniendo un gran éxito desde el primer momento. Ya en la primera semana del proyecto en la plataforma logró recaudar la suma de 500.000 pesos llegando al final de su campaña con casi el millón de pesos de recaudación.
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Hasta hoy sigue siendo imposible tener noticias del promotor, Miguel “Mick” Islas.
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El creador de la campaña de Foodies llamado Miguel Islas también es fundador de la startup Kangou de entregas bajo demanda y nada parecía hacer sospechar que un proyecto de tal envergadura podría ser considerado un fraude meses después de finalizar su campaña. Al principio todo parecía a ir bien, ya que se instrumentaron mecanismos de comunicación entre los más de 180 inversores del proyecto y los promotores. Pero a partir de verano la situación cambió y la comunicación se disipó. Según comentan algunos de los inversores del proyecto, desde esa fecha se comenzaron a eliminar perfiles e información en redes sociales sobre el proyecto y el promotor y hasta hoy sigue siendo imposible tener noticias del promotor, Miguel “Mick” Islas.
La propia plataforma fue la responsable de mediar entre las partes y dar respuesta a los inversores en la medida en que disponían de información, pero incluso los propietarios de Fondeadora han encontrado una barrera para poder encontrar algún rastro de Foodies y sus promotores. Estamos ante un caso claro de fraude en crowdfunding en México. Más de un millón de pesos invertidos, más de 180 inversores, y la ausencia total de un proyecto.
No es el primer caso de este tipo en el sector ni tampoco será el último, son diversas las razones que llevan a un proyecto a esta situación y tampoco las plataformas tienen en muchos casos posibilidades de detectar estos fraudes con antelación. No obstante, no quiere decir que la confianza en esta actividad y en esta fuente de financiación deba verse mermada, pero si que los inversores en estos proyectos sean conscientes del alto riesgo asociado a estas inversiones.
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