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Voces enfrentadas en el caso Heroquest: Muchos mecenas se sienten “abandonados”

Voces enfrentadas en el caso Heroquest: Muchos mecenas se sienten “abandonados”

Si hablas de Heroquest y no es para echar mierda, eres un enemigo”

“Esto es una telenovela venezolana y la mayoría de lo que se dice es mentira”

“Son una minoría de haters”

Algunos mecenas incluso hablan de problemas de derechos de autor

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Nadie dijo que el Crowdfunding fuera fácil…

Pero sí que, en muchas ocasiones, acaba mereciendo la pena. Se estima de promedio  el 50% de estas campañas consigue el éxito final. Los retrasos en los productos son frecuentes y los ánimos suelen erizarse. Y es que, a veces, las cosas se complican. Crowdemprende, con su seguimiento de los proyectos de finanzas colaborativas en numerosos sectores de la economía, ha encontrado en el ya caso Heroquest25 un ejemplo para analizar muchas de las dificultades inherentes a este tipo de proyectos, todavía relativamente novedosos en nuestro país.

Si en nuestra primera entrada sobre el tema entrevistábamos al CEO de Gamezone y alma máter de la edición homenaje al legendario juego de mesa, Dionisio Rubio, en esta entrega nos centramos en otras voces que han criticado el proyecto desde plataformas, foros y asociaciones. Los testimonios recibidos nos llegan, por suerte, en un tono mucho más respetuoso que tras nuestro primer artículo y de estos podemos extraer una primera conclusión: la empresa Gamezone se encontró ante una inesperadamente gran demanda que, hasta el momento, no ha sido capaz de administrar para satisfacer a muchos de sus mecenas. La empresa de Dionisio Rubio debería haber prestado más atención a la importancia de la comunicación con el cliente. Si bien ha habido numerosos esfuerzos, los errores cometidos han terminado por provocar vacíos informativos, un caldo de cultivo ideal para rumores y especulaciones que no han puesto las cosas precisamente más fáciles.

¿Demasiado para Gamezone?

Hardhead es un youtuber especializado en juegos de mesa que coincide con esta versión general de los hechos. Para este, a Gamezone el proyecto Heroquest “(…) les ha quedado grande”. El pecado original, el de ver el proyecto desde el prisma de una fábrica de miniaturas, cuando una mirada global destaca la relevancia de las fichas de los personajes y de las reglas del juego, entre otros aspectos, lo que lleva a un escenario más complejo. Algo que muchos mecenas han reclamado a Gamezone a través de e-mails, desde canales de youtube, foros e, incluso, en visitas a su taller en Sevilla. Por estas razones, algunos mecenas se sienten “abandonados”. Hay más razones destacables. Juan José Gutiérrez, miembro del foro Darkstone, entre otros grupos, afirma que la empresa simplemente no cumplió con lo afirmado inicialmente: ni fueron transparentes, ni mostraron el proceso de trabajo, ni mucho menos contaban con las herramientas y los conocimientos necesarios para llevar a cabo el proyecto.

Mesa de trabajo de Dionisio Rubio, CEO de Gamezone Miniatures

Mesa de trabajo de Dionisio Rubio, CEO de Gamezone Miniatures

Algo más que un retraso

¿Pudo ser un error anunciar la salida del producto para diciembre de 2014? No hace falta preguntar a nadie para deducir que este hecho incrementó la frustración, la incertidumbre y el mal ambiente. Según Gutiérrez, esta “falta de profesionalidad” se acrecentó con un apagón informativo que llega hasta el pasado mes de enero, actualizaciones escasas y, para colmo, con la entrada en escena de youtubers que habrían llevado a cabo una “venta encubierta” de miniaturas del juego. Para Fernando Alonso Cebrián, el de Gamezone “es un caso aparte”, ya que “comenzó el proyecto por el tejado y sin vigas de apoyo”; un “trato deleznable”, “una burla mayúscula” y “una tomadura de pelo”, con “filtraciones a terceros”, “engaños”, “cambios unilaterales” y “mentiras”. Para aportar algo más que opiniones, este fundador enumera una serie de iniciativas de crowdfunding que terminaron tarde pero con la profesionalidad y el trato merecidos por los mecenas: “Zombicide Black Plague”, “Skull tales”, “Mare Nostrum”, “Barbarian Hords”…

La conjura de los haters

Pero no todo son enmiendas a la totalidad. Aparte de los mecenas críticos, existen otros puntos de vista: “Mira, los haters son una minoría, pero se han acostumbrado a esto. Siempre que alguien habla del tema Heroquest y no es para echar mierda sobre el proyecto o sobre Dionisio, es un enemigo de ellos”. Para esta fuente, que ha preferido conservar su anonimato, las voces más críticas no representan a los mecenas del proyecto que, si bien pueden estar algo inquietos e incluso decepcionados con los retrasos sucedidos, esperan de una manera más razonable la salida del producto y comprenden las dificultades por las que está pasando.

Una minoría en contra

“Sí, hay un problema real: las expectativas de negocios han sido brutalmente sobrepasadas por la campaña. Un crowdfunding que tiene unas previsiones determinadas y que se encuentra con una demanda muchísimo mayor se topa con que los gastos se van de madre, con que hay que compensar los tiempos… Aunque no lo creas, el tiempo no es el problema, aunque mucha gente se queje. No puedo negar que no sean quejas reales, pero cómo se nota que ha sido el primer crowdfunding para muchos… (…) Y son pocos, porque de unos 6.000 mecenas se te quejen 40… Estas personas se han acostumbrado a la fama de Internet y la propician con engaños para que la gente les siga”.

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¿Por qué no lo vendieron?

Para esta fuente, que no obstante critica que la comunicación debería haber sido más efectiva en algunos momentos, resulta extraño que muchos mecenas insatisfechos no quisieran revender sus derechos sobre los productos contratados a tiempo: “Todas las campañas tienen una fecha tope para devolver el dinero; existe la posibilidad de revender el pledge porque además el Heroquest vende mucho ahora mismo. La gente gana lo invertido, por uno de 150 he visto pagarlo a 300. Claro, el morbo añadido de que no termina de salir, pues se paga más (sic)”. “En general hay un hastío al que si le quitas la mugre es solo retraso en las fechas. Esto es como una telenovela venezolana y la mayoría de lo que se dice es mentira. Si te preocupa tanto, vive la vida y que te den tu dinero”.

El papel de Lánzanos

¿Cómo puede haber solamente una minoría de cuarenta haters tratando de reventar Heroquest por puro odio y ojeriza cuando el grupo de Facebook “Quiero mi Heroquest 25 Aniversario” supera ya los 1.700 miembros? ¿Manipulación, rumores, borreguismo?¿Qué ocurre con Lánzanos? Algunos otros mecenas recuerdan el papel de la plataforma de crowdfunding: “Dudo mucho que Lánzanos haya realizado un estudio adecuado del proyecto y de la hoja de ruta que pretendía realizar Dionisio (…) Se trata de una irresponsabilidad altamente reprochable”. Una supuesta falta de profesionalidad que también suscribe Jesús Torres, presidente de la asociación Jugamos todos: “Aceptaron el proyecto por su esperable montante económico a sabiendas de su dudosa ética, escudándose en que ellos no serían responsables”.

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La maraña de los derechos de autor

Este último testimonio no es el de un mecenas, pero sí es necesario para cerrar el reportaje. Jugamos todos se define como una asociación lúdica que reivindica la relevancia social de los juegos de mesa. Celebran anualmente el Festival Internacional de Juegos de Córdoba y tienen un amplísimo conocimiento sobre la autoría, las características y la historia de los juegos más importantes del panorama mundial. A pesar de que ya no apoyan el proyecto, Jesús nos cuenta que sí fueron mecenas en un primer momento, hasta comprobar que se estaba realizando un ejercicio de “piratería lúdica”. En este sentido, Dionisio Rubio no habría reconocido la autoría del juego original (Stephen Baker) y estaría realizando una versión apócrifa, al no haber ni siquiera llegado a un acuerdo con la empresa productora original: “Durante estos años, el Heroquest de Stephen Baker no se ha reeditado, entre otros motivos, porque su producción fue una colaboración de varias compañías y sus derechos están hechos una maraña, con su autor original trabajando para una de las partes. Varias compañías editoras de juegos han intentado publicarlo a lo largo de los últimos años pero ninguna ha conseguido poner de acuerdo a todas las partes. Fue sorprendente que una compañía sevillana sin experiencia en el mundo de los juegos de mesa (eran simplemente fabricantes de miniaturas) lo hubiese logrado. Cuando se descubrió que el proyecto pretendía solo copiar y aprovecharse del juego original y su marca sin permiso del autor o las compañías tenedoras de sus derechos, las voces críticas no faltaron”. Es en este punto donde Jugamos todos se aparta del proyecto. Gamezone se habría apropiado del exitoso nombre de Heroquest para conseguir casi 700.000 euros de financiación colaborativa.

Hablaremos con todos

Como se puede concluir, las versiones difieren enormemente según a quién se le pregunte. Gamezone encara la fase final de la elaboración del Heroquest 25 Aniversario con bastante viento de cara. Desde Crowdemprende no queremos perdernos ni un solo capítulo e informar de manera plural y sobre todo transparente. El portal espera la participación de otras partes del proyecto que aclare aún más la situación. No sintonicen otro canal.

Imágenes / Gamezone y Lanzanos

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