Por qué invertir en coliving puede ser más rentable que en pisos turísticos
Si estás buscando nuevas oportunidades de inversión, el coliving puede ser una opción más rentable y estable que los tradicionales pisos turísticos. Este modelo ha ganado fuerza en los últimos años gracias a su capacidad de generar mayores ingresos y adaptarse mejor a las nuevas demandas del mercado inmobiliario.
El coliving no solo optimiza el uso del espacio, sino que también ofrece servicios adicionales que aumentan su atractivo. Elementos como la lavadora, la cocina equipada o la limpieza periódica marcan una gran diferencia frente a otros tipos de alquiler más convencionales.
Coliving: rentabilidad superior y optimización del espacio
Cuando decides invertir en coliving, aprovechas mucho mejor cada metro cuadrado. En lugar de alquilar una vivienda completa, puedes alquilar habitaciones individuales, lo que multiplica los ingresos potenciales.
Por ejemplo, un piso que en alquiler tradicional te daría unos 1.200 € al mes, podría alcanzar los 1.800 € si lo alquilas por habitaciones. Además, las tasas de rentabilidad suelen ser entre un 30% y un 40% superiores a las del alquiler residencial.
El modelo también te permite flexibilizar precios según las características de cada habitación, añadiendo valor con servicios extra y zonas comunes bien equipadas.
Alta ocupación y estabilidad en la inversión inmobiliaria compartida
Una de las principales ventajas de apostar por la inversión inmobiliaria compartida es la alta tasa de ocupación que ofrece. A diferencia de los pisos turísticos, donde los ingresos dependen mucho de la temporada, el coliving mantiene la demanda activa durante todo el año.
Este tipo de vivienda atrae a estudiantes, jóvenes profesionales, nómadas digitales y expatriados. Todos ellos buscan estancias de media duración y servicios que les faciliten el día a día. Así, puedes reducir el riesgo de vacíos y asegurar ingresos constantes.
En ciudades grandes, las tasas de ocupación superan con facilidad el 90%, e incluso pueden llegar al 99% en algunas ubicaciones estratégicas.
Servicios incluidos: el gran valor añadido frente al alquiler tradicional
El coliving no se limita a ofrecer una habitación; aporta una experiencia de vida completa que mejora la percepción de valor. Y ahí es donde marcan la diferencia los servicios incluidos.
Incluir limpieza periódica, mantenimiento, suministros como internet de alta velocidad o zonas de coworking permite que puedas cobrar tarifas superiores a las del alquiler tradicional. Para los inquilinos, tener todo resuelto en un único pago es una ventaja enorme.
En un mercado cada vez más competitivo, ofrecer una cocina completamente equipada, una lavadora de uso compartido y zonas comunes agradables puede ser el factor decisivo para atraer y fidelizar a los residentes.
Menor riesgo legal y mejor resiliencia ante crisis económicas
Invertir en pisos turísticos hoy implica lidiar con regulaciones estrictas, licencias y cambios legales que pueden reducir drásticamente la rentabilidad. El coliving, en cambio, se apoya en contratos de media estancia, menos expuestos a la normativa de alquiler turístico.
Esta flexibilidad legal te proporciona una mayor seguridad a largo plazo y evita los problemas derivados de posibles cambios regulatorios en tu ciudad.
Además, la demanda de coliving no depende del turismo, por lo que resiste mejor las crisis económicas, sanitarias o sociales. Durante la pandemia, muchos proyectos de coliving siguieron operando con alta ocupación, a diferencia del colapso de los pisos turísticos.
Diversificación de ingresos y adaptación a nuevas tendencias sociales
Una de las grandes bazas del coliving es la diversificación. No solo generas ingresos alquilando habitaciones, sino también ofreciendo servicios premium como eventos sociales, clases de cocina, actividades de networking o servicios de coworking.
Estos ingresos adicionales te permiten mejorar la rentabilidad total del proyecto y reducir la dependencia de una sola fuente.
Además, el coliving responde a tendencias sociales como el teletrabajo, la economía Gig y la búsqueda de experiencias comunitarias por parte de las nuevas generaciones. Esto amplía tu público objetivo y fortalece la demanda a largo plazo.
En definitiva, apostar por el coliving es adaptarte a un mercado que valora la flexibilidad, los servicios y la comunidad por encima de la simple oferta de alojamiento.
