Puertas antiguas de madera, el elemento central de la decoración rústica
A través de la decoración de un hogar o un negocio se puede transmitir mucho. Los amantes de la decoración buscan siempre un punto medio entre estética y funcionalidad. Sentir la huella del tiempo en los muebles de una estancia es la clave para una decoración de estilo rústico que incluya antigüedades y objetos con historia. Las puertas antiguas pueden darle a tu vivienda un toque exclusivo y personal y marcar la diferencia entre un espacio vacío o con alma.
Decoración rústica y una segunda oportunidad para las puertas antiguas
Uno de los requisitos fundamentales para conseguir una decoración de estilo rústico es recuperar, restaurar. Es un trabajo artesanal con el que se consigue un mueble o elemento actual y totalmente funcional sin que pierda la esencia del momento en el que fue creado. La restauración de muebles antiguos está muy vinculado al sector del lujo, ya que, al valor de las piezas en sí, que se han conservado y mantenido a lo largo de los años, se le añade un valor todavía más importante, el del trabajo minucioso y personalizado de retocar, modelar y recuperar la pieza.
En el caso de las puertas antiguas, su restauración es pausada y rigurosa, más aún teniendo en cuenta que la puerta debe ir en sintonía con el resto del espacio y, por tanto, hay que adaptarla y personalizarla. La restauración de muebles antiguos es una profesión minoritaria debido a la proliferación de tiendas de bajo coste que producen muebles de muy baja calidad en cadena. Sin embargo, en la actualidad el gusto por lo antiguo, por los elementos con historia, ha repuntado y la decoración rústica e industrial gana protagonismo. Es precisamente a lo que se dedican empresas como Conely con una gran experiencia en la fabricación y restauración de puertas.
La madera, el material tendencia
Si hay un material que ha ganado valor con el paso del tiempo y que es tendencia en todos los hogares este es, sin ninguna duda, la madera. Es valorada por ser un elemento natural que convierte cualquier espacio en un lugar acogedor, cálido. De alguna forma nos pone en contacto con la naturaleza y eso transmite una sensación de paz en nuestros hogares. Además, la madera combina a la perfección con otros materiales pétreos o cerámicos y con metales de fundición como el hierro.
Los restauradores se basan en la filosofía de que lo bello es lo imperfecto, aunque lógicamente, intentan sacar el máximo partido a cada pieza. La madera se presta a esta idea, ya que, aunque quede pulida, uniforme y de aspecto robusto, sigue conservando en su propia textura el paso del tiempo a través de grietas y alteraciones en el color. Otro de sus puntos a favor es que para construcción y decoración se dispone en la actualidad de una gran cantidad de tipos de madera.
Conely destaca dos creaciones muy particulares de puertas antiguas de madera, las rústicas pero de estilo clásico y las de inspiración oriental, que se distinguen por sus colores cálidos y dibujos florales. Las puertas de madera pueden llevar otros elementos que las hacen únicas como celosías, clavos, barrotes o cuarterones. Los herrajes, tiradores o llamadores también proporcionan al conjunto un acabado especial y exclusivo.
El valor de lo antiguo
En la era de los objetos que se clonan industrialmente y cuyas réplicas aparecen como por arte de magia, es emocionante comprobar como todavía se conservan piezas realizadas con un trabajo artesanal de por medio. Este trabajo manual lleno de tradición supone que no hay dos objetos iguales, ya sean puertas antiguas o cualquier otro mueble.
Los amantes de las antigüedades, destacan a favor de las mismas su autenticidad, su calidad, ya que algunas piezas tienen más de 100 años y la historia que muchas de ellas cuentan. Contribuyen a conservar la memoria histórica y los estilos artísticos que forman parte del pasado. Instalar en tu hogar o en tu negocio una puerta de estilo romántico de hace un siglo, una con motivos de la India o un portón tallado es un auténtico lujo asequible. Las antigüedades y los muebles restaurados también son una solución para quienes se preocupan por la sostenibilidad y por el medio ambiente.